Lyon es una de las ciudades de Francia que más posibilidades ofrecen al viajero: museos, iglesias, barrios únicos e incluso un teatro romano. Descubre cómo organizamos nuestro itinerario por esta ciudad y no te pierdas nada durante tu viaje. Aviso: Nosotros fuimos en enero y podemos decirte que hacía muuucho frío.

Día 1: Llegada a Lyon y Hôtel-Dieu

Nuestro viaje a Lyon comenzó un jueves. Salimos de Madrid a las 14h y en menos de dos horas estábamos en nuestro destino. Fuimos al hotel a dejar nuestras mochilas y salimos con ganas de aprovechar lo que nos quedaba de tarde. La primera visita fue el Hôtel-Dieu, una de nuestras joyas ocultas de Lyon, y que se encontraba bastante cerca de nuestro alojamiento. Es realmente curioso ver en qué se ha convertido este edificio que antiguamente funcionaba como hospital.

Tras ver el Hôtel-Dieu, nos encaminamos hacia la Place des Terreaux, donde pudimos contemplar el ayuntamiento y el museo de Bellas Artes. Dimos un paseo por esta céntrica zona antes de cenar y tras hacerlo nos fuimos al hotel a descansar.

Día 2: Notre-Dame de Fourvière y Vieux Lyon

El segundo día en Lyon teníamos un objetivo claro: ver la Basílica Notre-Dame de Fourvière y el Vieux Lyon. Así que tras desayunar, salimos con rumbo a la colina de Fourvière.

Nosotros decidimos subir caminando para ir disfrutando de las vistas, pero es posible hacerlo en funicular por solo 3€. Una vez arriba pudimos disfrutar de la maravillosa Basílica y de la Capilla de Saint Thomas – Sainte Marie. Nos encantó. Cerca de allí se encontraba el Teatro Galo-Romano, así que decidimos hacer una parada para verlo antes de bajar hacia el Vieux Lyon para comer.

Después de reponer fuerzas, aprovechamos la tarde para conocer el Vieux Lyon. Visitamos la Catedral de Lyon, ubicada en este barrio, y descubrimos nuestro primer traboule, situado en la Rue Saint-Jean. También tuvimos tiempo para perdernos un poco y encontrarnos con un montón de cafeterías, pequeñas tiendas y museos. Cuando llegó la hora de cenar, paramos en una crêperie y pusimos punto final al viernes.

Puedes descubrir nuestras recomendaciones para comer en Lyon en este artículo.

Día 3: Barrio de Croix-Rousse y traboules

El sábado planteamos un recorrido por el barrio de Croix-Rousse, ya que queríamos ver el Mur des Canuts y descubrir los famosos traboules. De camino hacia este barrio, pasamos por el Fresque des Lyonnais, un lugar realmente bonito en el que hacerse fotos y conocer un poco más de la vida cotidiana de la ciudad.

Desde allí, continuamos nuestro camino hacia el barrio Croix-Rousse, con una parada para comer a mitad del trayecto. Finalmente acabamos llegando al Mur des Canuts alrededor de las 16h. No decepcionó. Al igual que el Fresque des Lyonnais, se trata de un mural precioso que ocupa toda la fachada de un edificio. Desde allí, nos acercamos a la Maison des Canuts, un museo donde terminamos de hacernos una idea sobre la vida e historia del barrio.

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Para volver al centro decidimos usar alguno de los traboules que se encontraban en el barrio, y no pudimos tener una mejor idea. Fue muy interesante descubrir estos pasadizos ocultos y nuestro favorito fue uno llamado Cour des Voraces.

Tras todo este recorrido, acabamos llegando al centro bastante tarde, así que ¿qué mejor plan que un vino y una tabla de quesos? Buscamos un sitio que tuviera buena pinta y acabamos el día de la mejor manera.

Día 4: Visitamos el Museo Lumière

Nuestro último día en Lyon queríamos dedicarlo al Musée Lumière. Es el lugar turístico de la ciudad que está más alejado del centro, así que le reservamos toda la mañana del domingo.

Nos acercamos en metro y en menos de media hora estábamos por la zona del museo. La entrada costó algo menos de 10€, pero la visita merece la pena desde el principio. Además de museo, este lugar era la casa de los hermanos Lumière y está conservada en un estado excelente, por lo que pasear por las estancias es toda una experiencia. Además, la colección de objetos de la historia del cine que hay dentro del museo es una maravilla.

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Al salir, nos tomamos un café en el Café Lumière, justo frente al museo y nos dimos una vuelta por la enorme tienda del Musée Lumière, donde había auténticas joyas para los amantes del cine. Posteriormente, comimos en un sitio cercano y nos dirigimos a nuestro hotel a por el equipaje. Había que volver a Madrid.

Presupuesto del viaje

Lyon es una ciudad con un coste de vida medio-alto y eso es algo que podrás comprobar tanto buscando alojamientos (entre 90 y 110€ de media) como con el precio de comer o cenar en cualquier restaurante (unos 15-18€ por persona). Sin embargo, es una ciudad que se puede recorrer fácilmente a pie, por lo que no te hará falta realizar un gran desembolso en transporte público, salvo quizá algún billete de metro individual. A continuación os dejamos con una aproximación de nuestro presupuesto:

Noche de hotel: Sobre 90€ por noche.

Billete de metro: 1,90€ cada billete sencillo.

Vuelos: Nosotros pagamos 120€ por persona ida y vuelta.

Comidas: Unos 90€ por persona.

Conclusiones

Lyon es una ciudad preciosa y muy fácil de recorrer, tanto caminando como mediante el transporte público. En ella encontrarás un montón de lugares para visitar, barrios muy pintorescos por los que pasear y sitios llenos de historia. Para verla con tranquilidad, necesitarás 4 o 5 días, pero estamos seguros de que os merecerá la pena. Para nosotros es una de las ciudades con más encanto de Francia.

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