Quebec fue la última ciudad de nuestro recorrido por la costa este de Canadá y la verdad es que fue un colofón inmejorable. Su precioso centro histórico, su variada gastronomía, su cercanía al río San Lorenzo y el encanto de sus callejuelas nos hicieron pasar unos días maravillosos que os contaremos a continuación.

Día 1: Probando las tires d’érable

El primer día de nuestra estancia en Quebec comenzó muy pronto con el traslado en coche desde Saint-Côme, que incluyó una parada intermedia en la coqueta Trois-Rivières. Nuestro apartamento se encontraba en Lévis, una ciudad en la otra orilla del río San Lorenzo, así que una vez llegamos allí, dejamos las mochilas y cogimos el ferry hacia Quebec para comenzar nuestra aventura.

Pasamos el resto del día recorriendo lugares emblemáticos del centro histórico como el Quartier Petit Champlain, la Place Royale, la Iglesia Notre-Dame-des-Victoires o el Fresque des Quebecois. Además, pudimos probar uno de los dulces más típicos de Quebec, las tires d’érable, unas piruletas de jarabe de arce que se enfrían directamente en la nieve

Descubre nuestros artículos con los lugares imprescindibles y las joyas ocultas de Quebec.

Día 2: Montmorency y Lévis

El segundo día nos acercamos a la Reserva de los Indios Hurones de Wendake (aunque no realizamos la visita guiada porque no nos pareció que mereciera la pena) y a las Cascadas de Montmorency, que nos parecieron una auténtica pasada. Al terminar, nos acercamos al Parque Bois-de-Coulonge, donde contemplamos la exposición de esculturas florales llamada Mosaïcultures.

Por la tarde decidimos recorrer la otra orilla del río San Lorenzo y explorar Lévis, la ciudad en la que teníamos nuestro alojamiento. No te pierdas este post en el que contamos cómo llegar y qué ver en Lévis.

Día 3: Conociendo el Vieux-Québec

El último día en Quebec lo dedicamos a recorrer el centro histórico y visitar los lugares que nos quedaban pendientes. Comenzamos por el Château Frontenac y la Catedral-Basílica Notre-Dame de Quebec, continuamos viendo la peculiar Maison de la Littérature y el Morrin Centre, y posteriormente, nos dirigimos al Edificio del Parlamento de Quebec, el cual recorrimos mediante una de las visitas guiadas gratuitas. Después de comer, fuimos a la concurrida Avenida Cartier, dónde pudimos contemplar la famosa colección de lámparas gigantes que se encuentra a lo largo de la calle.

¿Qué y dónde comer en Quebec?

Al atardecer nos acercamos a la ribera del río para dar un paseo y acabamos viendo la Ciudadela de Quebec y la Puerta de St. Louis antes de coger el ferry de vuelta a Lévis. Al día siguiente a primera hora salimos hacia Montreal para devolver el coche de alquiler y pasar nuestro último día en Canadá.

Presupuesto del viaje

Al igual que el resto de ciudades que visitamos en Canadá, Quebec cuenta con un nivel de vida elevado, y es algo que se ve tanto a la hora de buscar alojamiento como a la hora de parar a comer. Nosotros acabamos cogiendo un alojamiento al otro lado del río San Lorenzo, en Lévis, y pagamos unos 80€ por noche, pero la mayoría de hoteles del centro de Quebec rondaban los 110-120€/noche. Respecto a los restaurantes, el precio medio rondaba los 15-18€ por persona. Nuestro presupuesto aproximado fue algo parecido a esto:

Noche de apartamento en Lévis: 80€ por noche.

Entradas al Parque de Montmorency: Alrededor de 9€ por persona.

Alquiler de coche: 300€ + Gasolina (140€ aprox). Descubre en este post todo sobre el alquiler de coche y el transporte en Canadá.

Vuelos: Nosotros pagamos 450€ por persona, ida y vuelta a Montreal.

Comidas: Unos 120€ por persona.

IMPORTANTE: La moneda oficial de Canadá es el dólar canadiense, no el euro, por lo que algunos precios podrán variar un poco y deberás cambiar algo de dinero para tu viaje.

Conclusiones

Quebec es una ciudad muy interesante y muy diferente al resto de lugares de la costa este de Canadá, por lo que consideramos que es una visita imprescindible para cualquier viajero que se encuentre por la zona este del país. Nuestra recomendación es dedicar al menos 3 días a recorrerla: 2 de ellos para ver los sitios más emblemáticos del centro histórico y 1 para realizar excursiones a lugares cercanos como las cascadas de Montmorency o Lévis.

Si nuestros días en Quebec te han parecido interesantes, estamos seguros de que también disfrutarás con Ottawa, Montreal y Toronto.