Con más de 22 millones de habitantes, Pekín es una de las ciudades más imponentes del mundo. Su milenaria historia se entremezcla con las construcciones más vanguardistas, y lugares como la Ciudad Prohibida, el Palacio de Verano o la Gran Muralla China contrastan con los grandes rascacielos, empresas tecnológicas y modernos complejos arquitectónicos. Nosotros tuvimos la suerte de visitarla durante 4 días y en este artículo os contaremos qué vimos y cómo nos organizamos.
Día 1: Una noche en Wangfujing
Llegamos a Pekín alrededor de las 16:00h, en un vuelo directo desde Taipéi que duró alrededor de 3h. Una vez que pasamos todos los controles de acceso al país (1h más o menos), fuimos a comprar una tarjeta SIM en el propio aeropuerto. Terminados todos los trámites y con la conexión a internet lista, nos pusimos en marcha.
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La primera parada fue nuestro apartamento, ubicado en un hutong (barrio tradicional chino) del distrito de Dongcheng. Tras dejar las mochilas, comenzamos con nuestro primer plan en la capital china, recorrer la animada zona de Wangfujing. Pasamos toda la tarde paseando por sus calles, entrando a algunas de sus tiendas e incluso visitamos la Iglesia de San José, una de nuestras joyas ocultas de la ciudad. Tras cenar, alrededor de las 23:00h, partimos de vuelta a nuestro alojamiento para descansar, que teníamos previsto un segundo día muy intenso.
Día 2: Fascinados con la Gran Muralla China
Nuestro segundo día en Pekín comenzó muy pronto, a las 7 de la mañana en concreto, hora en la que un conductor que habíamos contratado desde Madrid vino a recogernos para visitar las Tumbas Ming y la Gran Muralla China de Mutianyu. La verdad es que hacía un día horrible puesto que estaba lloviendo mucho, pero no teníamos ninguna otra opción, así que nos metimos en el coche y comenzamos la ruta.
La primera parada fueron las Tumbas Ming, un enorme complejo funerario en medio de la naturaleza que la verdad es que nos decepcionó un poco, puesto que gran parte de las tumbas no están abiertas para turistas (y además estaba lloviendo muchísimo). Desde allí, nos encaminamos a Mutianyu para ver la Gran Muralla China, lugar en el que pasamos el resto de la mañana y del que salimos realmente encantados. La Gran Muralla China no nos decepcionó y es sin duda uno de los lugares más impresionantes que hemos visitado nunca. Al terminar la visita pusimos rumbo al apartamento, al que llegamos sobre las 15:00h, hora perfecta para comer algo y descansar un rato.
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Por la tarde fuimos a ver el atardecer desde la Colina del Carbón, donde disfrutamos de una panorámica preciosa del Parque Beihai y de la Ciudad Prohibida; y para terminar el día nos acercamos a la concurrida Qianmen Street, lugar en el que realizamos alguna compra y cenamos el famoso pato pekinés.
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Día 3: Visitamos la Ciudad Prohibida
Arrancamos el tercer día yendo a la Ciudad Prohibida, uno de los principales sitios de interés de la ciudad y alrededor del cual fluye la vida en Pekín. Había que comprar las entradas con una semana de antelación, pero nosotros quisimos evitar problemas (ya que estábamos en Taiwán) y las reservamos con Travel China Guide, un proveedor externo. Conoce todas las opciones para conseguir entradas en Pekín aquí. La verdad es que el complejo de la Ciudad Prohibida impresiona y te deja sin palabras desde que cruzas la enorme puerta de entrada hasta que sales de él.
Una vez terminamos nuestra visita, acudimos a la Plaza de Tiananmen, situada a poca distancia de allí, y nos acercamos al Zhengyangmen, una emblemática puerta de la muralla de la ciudad que se construyó en el siglo XV.
Por la tarde, llegó el turno del Templo del Cielo, ubicado en un enorme complejo con jardines, pabellones y todo tipo de construcciones que os dejarán fascinados. Alrededor de las 18:00h fuimos al apartamento a descansar y acabamos el día saliendo a cenar por el animado barrio de Sanlitun.
Día 4: Un templo, un palacio y una mansión
Comenzamos nuestro último día de viaje visitando el Templo de los Lamas, una de las construcciones religiosas más importantes de la ciudad situada a solo dos paradas de metro de nuestro apartamento. Desde allí, pusimos rumbo al Palacio de Verano, y pasamos el resto de la mañana recorriendo todas sus construcciones y paseando junto al enorme lago Kunming.
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Después de comer, nos acercamos a la Mansión del Príncipe Gong, dimos una vuelta por el maravilloso Lago Houhai y contemplamos la Torre del Tambor. Como aún era pronto para nosotros porque nuestro vuelo salía a las 2:00 de la madrugada, decidimos acercarnos a pasar el resto de la tarde al 798 Art Zone, un complejo artístico y cultural al noreste de Pekín.
Tras acabar con todas las visitas y con las pocas fuerzas que nos quedaban, fuimos al hotel a recoger el equipaje y cogimos un DiDi hasta el aeropuerto. Tocaba volver a casa.
Presupuesto del viaje
Pekín es una ciudad relativamente barata en comparación con las grandes capitales europeas, y eso es algo que se ve reflejado en el precio de los alojamientos, el transporte y la comida. Podrás encontrar hoteles y apartamentos bien ubicados a partir de 60-70€ por noche; restaurantes para comer o cenar por unos 10€ por persona y montar en metro o autobús por menos de 1€. Sigue leyendo y descubre nuestro presupuesto aproximado.
Noche de apartamento: Sobre 80€ por noche.
Excursión a la Gran Muralla China de Mutianyu y las Tumbas Ming: 45€ por persona.
Billetes de metro: Alrededor de 0,50€ cada billete individual.
Vuelos: Nosotros realizamos la ida por Taipéi y la vuelta desde Pekín, y pagamos alrededor de 850€ por persona. El vuelo entre Pekín y Taipéi nos costó unos 100€ extra.
Comidas: Sobre 80€ por persona.
IMPORTANTE: La moneda oficial de China es el yuan chino, también denominado renminbi, no el euro, por lo que algunos precios podrán variar un poco y deberás cambiar algo de dinero para tu viaje.
Conclusiones
Pekín es una de las ciudades más increíbles que hemos visitado y uno de los mayores retos viajeros a los que nos hemos enfrentado. Las dificultades comunicativas, para conectarse a internet, conseguir entradas y demás, se te olvidan por completo cuando ves maravillas como la Gran Muralla China o el Palacio de Verano. Es un viaje muy recomendable pero debes prepararte muy bien antes de hacerlo. Nuestra recomendación es dedicar entre 4 y 5 días a visitar la ciudad, con posibilidad de ampliar algún día extra si quieres hacer excursiones.
Ahora que ya sabes cuál fue nuestro recorrido por la capital china, no te pierdas nuestro post con consejos para viajar al gigante asiático y el recorrido completo de 14 días por Taiwán y Pekín.
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